1.- El Diezmo
Todos debemos diezmar porque es un acto de adoración y obediencia a Dios. En cada iglesia local se espera que cada miembro que tiene ingresos diezme al Señor. Al igual, cada iglesia local es un miembro del Cuerpo de Cristo. ¿Por qué exhimimos a las iglesias locales del diezmo? La iglesia local también debe entregar su diezmo al Señor. Sería lindo que cada iglesia local diezmara para la obra misionera local y foránea.
Las denominaciones, por lo general, reciben el diezmo de los ingresos de cada iglesia. Y en algunas denominaciones donde tienen un programa o departamento misionero cada iglesia entrega una ofrenda aparte para la obra misionera.
Si usted es una iglesia independiente ¿Dónde entrega su diezmo?
Si usted es una iglesia denominacional: ¡No se conforme!
Ninguna iglesia local tiene excusa para no participar financieramente ni tampoco para limitarse.
2.- Designe un porcentaje
Otra idea que los Pastores pueden usar para apoyar la obra misionera es, designando un porcentaje de los ingresos generales mensuales o bien, designar un monto mensual específico. Este monto o porcentaje podría ser distribuído entre proyectos y misioneros a quienes la iglesia apoya.
Recuerde: es importante que la aportación sirva para apoyar proyectos fuera de la iglesia local, es decir, el diezmo y la ofrenda misionera idealmente no deben ser invertidos en los proyectos locales.
3.- Promesa de fe
Esta es una manera innovadora de apoyar la obra misionera. Los miembros en nuestras iglesias siempre tienen un excedente. Siempre tienen algo para gastar o ahorrar. Siempre tienen algo extra para invertir en sí mismos o para compartirlo.
Cuando el Pastor de la iglesia local no da oportunidad a los miembros para bendecir y colaborar con la obra misionera, en realidad les está causando un gran daño. No hay mejor lugar donde invertir que en la obra misionera. Por su puesto, los diezmos pertenecen a la obra local.
La promesa de fe es un acto por medio del cual cada hermano puede creer que Dios le prosperará, y cuando esa prosperidad llegue, el hermano sabrá que esa provisión especial es para la obra misionera.
4.- Don de liberalidad
La gran mayoría de Pastores piensan que si los miembros de su iglesia apoyan la obra misionera de manera individual entonces los ingresos de la iglesia disminuirán. Este es un temor infundado porque la Palabra enseña que es mejor dar que recibir. Imagine que los miembros de su iglesia son gente generosa que apoyan la iglesia local con sus diezmos y ofrendas; y además sirven en los diferentes programas y departamentos de la iglesia. ¡Y aparte, también apoyan las misiones!
¿Que va a pasar? Dios bendecirá a estos hermanos aun más porque lo que Dios les da, lo invierten en la extensión de Su Reino en las naciones y como resultado tendrán más para apoyar la iglesia local también.
Si usted invierte los recursos de Dios, en el Reino de Dios; entonces Dios le confiará aun más porque EL sabe que usted ha entendido que usted es un mayordomo y no el propietario de las cosas.
Amilcar Cabrera