Aunque el crecimiento numérico de los musulmanes en el mundo se debe mayormente al índice de natalidad, no podemos ignorar que el libro "sagrado" de ellos les enseña a conquistar por todos los medios a todos los pueblos.
Los musulmanes si toman en serio las instrucciones en su libro. Oran 5 veces al día. Ayunan. Colaboran económicamente. Visitan sus lugares "sagrados" y sobre todas las cosas no se quedan callados. Levantan su voz. Demandan libertad para practicar su fe. Exigen respeto a su profeta y sus prácticas.
Por el contrario los Cristianos no obedecen ni mucho menos conocen su libro. No oran. No colaboran. No ayunan. Son pasivos. No hablan de su fe. De hecho hasta chistes y bromas tienen con el nombre de su profeta - Jesús.
Ante esta triste y actual realidad, yo quiero exhortar a la Iglesia del Señor Jesús para que nos preparemos. Que cambiemos nuestra actitud. Que hagámos discípulos. Que dejemos de jugar a la religión. Que entendamos de una vez por todas que nuestras vidas no nos pertencen y que si estamos vivos, es para complacerlo a El.
Enviemos y seamos embajadores del Reino de Dios a todas las naciones.
El Señor Jesús dijo: "id por todo el mundo..." Mat.28:19 Así que no pierdas el tiempo orando infantílmente: ¿Es tu voluntad que yo vaya Señor?
JavierAmilcar Cabrera